El Enigma de la Habitación 622 - Joël Dicker - Reseña

 

¡Hola de nuevo!

Hoy vengo a hablaros de uno de mis escritores favoritos: Joël Dicker.  Y cuando digo favorito es porque tengo razones de peso, no para que me guste, sino para que me encante. Libros como La Verdad Sobre el Caso Harry Quebert y La Desaparición de Stephanie Mailer están en mi lista de lecturas favoritas (súper recomendadas) ya que son lecturas que te marcan, que estás deseando saber el final pero en el fondo no quieres que se acaben porque te encantan. Que te atrapan desde la primera página. 

Y algo así es lo que me ocurrió con este último libro de Dicker. Sin embargo, para sorpresa mía, este ha eclipsado a los anteriores ya que me ha tenido en vilo desde el minuto 1. Os lo voy contando detalladamente. 

SINOPSIS:

Una noche de diciembre, un cadáver yace en el suelo de la habitación 622 del Palace de Verbier, un hotel de lujo en los Alpes suizos. La investigación policial no llegará nunca a término y el paso del tiempo hará que muchos olviden lo sucedido. Años más tarde, el escritor Joël Dicker llega a ese mismo hotel para recuperarse de una ruptura sentimental. No se imagina que terminará investigando el viejo crimen, y no lo hará solo: Scarlett, la bella huésped y aspirante a novelista de la habitación contigua, lo acompañará en la búsqueda mientras intenta aprender también las claves para escribir un buen libro.

¿Qué sucedió aquella noche en el Palace de Verbier? Es la gran pregunta de este thriller diabólico, construido con la precisión de un reloj suizo. Joël Dicker nos lleva finalmente a su país natal para narrarnos una investigación policial en la que se mezclan un triángulo amoroso, juegos de poder, traiciones y envidias en una Suiza no tan tranquila, donde la verdad es muy distinta a todo lo que hayamos imaginado.

OPINIONES Y SENSACIONES:

Sencillamente una maravilla. Como os decía, el libro me atrapó desde el principio. Desde que comencé a leer y supe que había ocurrido algo en esa habitación, estuve pegada al libro página tras página. Los personajes están muy bien definidos, quizás también ayude a que la forma de narrar no sea enrevesada y esto ayude a que nos imaginemos perfectamente a los personajes. Si tuviera que recomendar el libro no lo dudaría, ya que ha sido una de mis lecturas favoritas de este año. De hecho, me lo he leído en pocos días porque no podía parar de leer y de saber qué pasaría en el siguiente capítulo. 

En cuanto al estilo y el vocabulario, he leído reseñas que se quejan de un estilo muy plano, un vocabulario muy simple y un libro algo pobre en este sentido. Desde mi punto de vista no puedo estar más en desacuerdo con esto. Para mi el libro ha sido una lectura cercana, de estas en las que te sumerges y puedes pasarte horas leyendo sin que te suponga un esfuerzo. 

Sigue leyendo y te cuento más en el apartado de Spoilers.

¡ATENCIÓN, SPOILERS!

Desde que la historia comienza, no piensas jamás que acabaría así. El autor es el personaje principal (es el propio Joël Dicker el que nos cuenta la historia). Nos hace creer que está de vacaciones en un hotel (cosa que descubrimos al final del libro que no es así ya que en 15 días no se ha movido de casa), y durante esas "vacaciones" ficticias nos va relatando cómo él y Scarlett (una chica que conoce en el hotel) van descubriendo qué ocurrió en la habitación 622 y lo más importante de todo: quién lo hizo. 

Descubren que la víctima era uno de los miembros del consejo del banco Ebezner y primo de Macaire: Jean-Bené. 

A lo largo de la lectura sospecharemos de Macaire, pensando que cometió ese asesinato para poder ser presidente del banco. También sospecharemos de Lev Levovitch, ya que huyó con la mujer de Macaire y en cierto punto siempre lo consideramos a ambos enemigos (tanto por la mujer por la que ambos luchan, Anastasia, como por la presidencia del banco). Anastasia también se convertirá en sospechosa, ya que antes de huir con Lev, subió al hotel la noche del asesinato, dejó una nota a Macaire en la que le pedía perdón por lo que hacía, y bajó de nuevo para huir con su amante por una salida de emergencias del hotel. Pero tiempo después se encontró cerca de esa salida de emergencias una pistola con el nombre de Anastasia grabado en la culata, algo que la sitúa en el punto de mira y la hace parecer la asesina de la habitación 622. 

Sin embargo, conforme llegamos a las últimas páginas nos llevamos la sorpresa (yo al menos sí) de encontrarnos con que el asesino no era ni más ni menos que el dueño del hotel, el señor Edmund Rose. Él siempre había apoyado a Lev y lo había apreciado y querido como al hijo que nunca tuvo. Lev cometió varios errores durante su vida y el señor Rose siempre intentó subsanarlos, y el hecho de que Lev se hiciera pasar por 3 personas ficticias para conseguir sus objetivos no iba a ser menos. 

Sinceramente, me podía esperar que cualquiera de los 3 personajes principales fuese el asesino en un giro inesperado de los acontecimientos. Incluso antes de saber la verdadera identidad del señor Tarnogol sospeché de él. Pero de un personaje secundario que apenas interviene en la novela... No esperaba ese giro ni ese final tan extraño. Quizás por este motivo no le doy la máxima puntuación a la novela. 

Nota: 9.5

Ni qué decir que me ha encantado, que la recomiendo encarecidamente y que estoy segura que os va a enamorar igual que a mi. Podría compararlas con la sensación que me dejaron las novelas de Javier Castillo, que son otras de mis favoritas sin duda. 

Si ya te has leído esta novela, cuéntame qué te ha parecido, ¡te leo en comentarios!